¿Estas aquí? (libre)

Hm...Dio unos pasos hacia un lado, reflexionando para sí, mientras aprovechaba para observar un poco mejor el templo. Aquello dejaba claro que Irun había pasado su vida confinado, sin saber nada del mundo exterior. Mal hecho, diria Wright si le preguntaban por su opinion. El aislamiento NUNCA es bueno.

- Entonces es una buena persona, ¿no? - Ignorando el hecho de que le tenía confinado, le daría ese punto a favor por salvarle la vida.

Irun volvió a entristecerse. Aquello era un ir y venir de sentimientos encontrados. Le miro a los ojos una vez más, intentando calmarle con la mirada.

- Quizás si...tuvo que hacer algo que no podía contarte. Pero no te preocupes: Seguro que está bien. - Intentó transmitirle un poco de fe y de optimismo. - Tu deberías intentar preocuparte menos, y no ir tan triste para todos lados. Se positivo. Ve sonriendo a cualquier sitio. Te sentirás mejor por dentro, créeme. - Le dedica una sonrisa, dicho esto.

Torció una sonrisa y esta vez pareció realmente sincera..

- Si... era... bueno.. aunque nunca hablaba... ni siquiera me quiso decir su nombre... y a veces se enfadaba cuando yo le decía de salir.

Pareció temblar un poco al recordarlo

- Dijo que nadie me aceptaría... y que por eso debía permanecer allí

Demasiado sobreprotector...

- Eso no es verdad. No puede saber si te aceptan o no si no te da la oportunidad de intentarlo. - Contestó, en opinión personal.

Miró a su alrededor, como intentando transmitirle algo a Irun, mientras abría los brazos.

- Por ejemplo...ahora estás aquí. ¿Has experimentado problemas sociales? ¿Te han rechazado? - Ladeó la cabeza.

- Nu... - respondió casi para el cuello de su chaqueta... pero... ¿seguiria aceptandole si veía sus orejas de gato?

No le miraba a los ojos cuando respondió

- Entonces...¡no pasa nada! - Respondió con una sonrisita. - Todos somos diferentes, pero si no te han rechazado hasta ahora, ¿por qué iban a hacerlo? Ya has probado que puedes enfrentarte a la sociedad.


Irun, de todas formas, seguia airado. Algo le pasaba. Quizás era la timidez, u ocultaba algo que no quería revelarle.

- Es que.. Él me dijo que era un bicho raro.. y que por eso mis padres me habían dejado... que.. que... - Bajó aun mas el tono de voz... - Que seguramente acabaría en un circo

Dio un paso atras, con el corazón acelerado.. quizas estaba hablando demasiado.

Pues vaya con el sobreprotector...ahí se había pasado un poco. Tampoco es que fuera anormal ni nada. Quizás ocultaba algo, pero no podía ser tan grave como para acabar en un circo. Ahí solo iban las personas desdichadas a las que nadie echaba nunca una mano. No tenía por qué ser así.



- No creo que acabases en un circo. Más que nada porque te mueves como yo me muevo, hablas como yo hablo... - Respondió, intentando tranquilizarle. - ¿Por qué no confias un poco más en tí mismo, y no haces tanto caso a esa persona a la que aprecias tanto?

- Yo.. no soy como tú... - Respondió y en la segunda pregunta se mordió los labios mostrando de nuevo esos colmillitos.. hasta ahora siempre había estado protegido por Él... nunca se había planteado el salir de alli y enfrentarse a los peligros..

- Eso es verdad. No eres como yo. Porque te han hecho creer que no eres como yo. - Respondió, secante. Si quería descubrir su secreto, tenía que tirarle de la lengua ahora. Cualquier intento posterior permanecería en el silencio para siempre. - ¿Qué eres? ¿Te falta un brazo? ¿Eres un robot, un ser metálico? Soy un bardo, un trovador de los caminos. Créeme, he oido de todo y he visto de todo. - Hizo una leve mueca con la boca, para acentuar su expresión.

- Ya te dije antes...que todos somos diferentes. Eso es lo que nos hace iguales a todas las personas. - Le dedica una sonrisa, dicho esto.

Le miró, suspirando...

- Yo.. creo que no soy humano del todo.. - se quito los guantes... mostrando sus pequeñas garras de gato.. pero aun no se habia quitado la capucha.. - soy.. un bicho raro.. Él lo dijo..

Irun había cedido, finalmente. Retiró los guantes de sus manos, solo para mostrar unas especies de manos mutadas, como si fueran medio humanas-medio garras. A lo mejor...era un licántropo, de esos que gustaban relatar en pueblos oscuros y que la gente se lo creía.

- Hasta ahora vamos normal. No veo problema. - Dijo. Movió un poco la cabeza para examinar más de cerca con la mirada aquellas garras. No sabría identificarlas a simple vista. No las había visto anteriormente. Puesto a compararlas, podrían ser de un gato. O de un león.

- Yo digo que eres normal. - Dijo, con certeza. - De ti depende creerte una cosa u otra.

Y finalmente se quito la capucha, mostrando aquellas orejitas del mismo color que sus dorados cabellos...

- ¿hay mas como yo? - le miró algo entristecido y con miedo a la vez... estaba temblando mucho mas que antes.

Abrió los ojos, levemente, pero sin que se notase. Irun, al quitarse la capucha, dejaba ver unas especies de orejas puntiagudas, pero sin punta (Si, un poco contradictorio) típicas de un gato. Si, un gato. Las manos encajarían con ese perfil, y quizás sus facciones abiertas de la cara también.

(""Un...¿gato?"") - Pensó.

- Así que eres un..gato? - Ladeó la cabeza, mientras lo escudriñaba con la mirada. - Que curioso... - Intentaba aparentar su sorpresa con palabras comunes, para no preocupar en exceso a Irun.

Dio unos pasos hacia un lado, sin dejar de mirar al chico.

- Bueno, a decir verdad, no he visto más gente como tú en mis viajes. - Dio un pequeño parón. Sabía que aquello pondría más nervioso y triste al chico, así que debía intentar otra cosa. - Eso no significa nada. ¿Crees que te veo distinto a como te veía con capucha? No, sigues siendo la misma persona. La unica diferencia que veo ahora mismo es que tienes las orejas más grandes que yo. - Bromeó.

- Es quee.. - alargó la ultima vocal bajando la mirada - Él..Él me hizo ver que eso era malo... que no gustaba... por eso nunca debia verme nadie...

En sus ojos había cierto alivio...

- ¿a ti.. te... gustan mis orejitas? No se lo que soy...nunca me lo dijo...



Off topic: me doy a dormir que me caigo -____-

- No se, no se...Él es demasiado sobreprotector, en mi opinión.

Oyó su último comentario y no pudo evitar sonreir. Vaya, por lo menos, Irun ahora sonaba más normal, más alegre, más alejado de la tristeza.

Bueno, sí, me gustan - Sonrió de nuevo, con más énfasis. - Son unas orejitas curiosas, la verdad. ¿Puedo tocarlas? - Preguntó.



FDR: Yo tambien, estoy soñando despiertooo! x_x xDDD

Afirmó con la cabecita, pese a que el simple roce le producía muchisimas cosquillas.. y tal vez algo más.

- Cl...claro... - eran suaves y estaban algo calientes al tacto.. quizas llevaba demasiado tiempo vagando sin apenas comer y le había subido un poco la fiebre.

Se acercó lentamente, dando muestras de confianza. Extendió la mano con lentitud pero con firmeza, y pasó las manos por su pelo, tocando ambas orejas y parte de su cabello. El tacto al pelaje era fino, y agradable; le recordaban al tacto de un gato. (Quizás por eso era que se parecía tnato a un gato)

- Pues si. Son de gato. - Respondió, con una sonrisa en la cara, intentando apartar su incredulidad por aquel suceso. Vaya, había contado muchas cosas como trotamundos, pero haber visto una cosa semejante no se había dado nunca.

Apartó la mano tras varios segundos de tacto, quedándose en su estado original.

- Eres una persona única, a decir verdad. - Dijo en forma de cumplido.

Cerró los ojos ruborizándose a mas no poder... y hasta soltó un gemidito.. le excitada de sobremanera que le acariciasen las orejitas.

- ¿e.. eso es malo? s.. ser unico?

Pregunto mirándolo mientras mostraba fruncia los labios casi como un niño.

Enarcó una ceja.

- No, no es malo ser único. - Respondió con franqueza. - Porque únicas somos todas y cada una de las personas en esta vida. Es una cuestión de aceptación

Ladeó la cabeza, esperando que aquello le diera por lo menos más confianza en sí mismo a Irun.

Sonrió al fin, ladeando tambien la cabeza.

- Creo que lo entiendo - Pero antes de que pudiese decir mas, su estomago empezó a rugir... dándose cuenta de que estaba muy muy hambriento.

Hizo un movimiento raro, dando paso a una mueca de asombro, un tanto exagerada (Todo sea por la comedia...)

- Esto...¿y la orquestra esa? - Dijo, señalando hacia su estómago. - Veo que hay hambre por lo visto, ¿eh? ¿Cuánto hace que no comes? - Preguntó un poco preocupado.

Si tenía mucha hambre, a lo mejor lo invitaba a algo.

- Ayer comí unos dulces... por la tarde... - musitó.. llevaba casi un dia entero sin probar bocado. Bajó la mirada avergonzado... - y... me robaron las monedas que un chico me dio..

Oyó lo que le había pasado. Vaya, era normal. Si no te andabas con cuidado, a lo mejor gente como....como él mismo podrían quitarte las ganancias de un mes en un momento.

Aunque, claro, el no robaba a los pobres.

Dejó su mochila en el suelo, y se puso a registrar sus bolsillos. Cuando dió con las galletas que tenían uno de ellos, cerró todo y extendió el paquete a Irun.

- Toma. Son de chocolate. Están muy buenas. Te llenarán el estómago; también son nutritivas. - Le dedicó una sonrisa. Agarró su mano-zarpa con mucho cuidado de no asustar a Irun y depositó la caja de galletas encima de esta. Luego se separó, dejando a Irun con el alimento. - Pruebalas. Son todas tuyas.

Miró las galletas y las olisqueó antes de llevarse una a la boca

- Que ricoo! - exclamó moviendo un poco sus orejitas, devorando todo el paquete de galletas de una sola sentada.

(perdon, he estado ausente por un trabajo que me tenia colapsada)

Irun parecía apreciar las galletas con gusto. Bueno, por lo menos tendría algo con lo que llenar su estómago por un tiempito.

Dado que aquella conversación se había alargado, probablemente a estas alturas se quedarían hablando un rato más, así que aprovechó el momento para sentarse cómodamente en el suelo, y apoyar su espalda en uno de los cientos de bancos que posee el templo para sentarse y orar.

- Si. Son unas galletas raras; son baratas, enérgicas y saben muy bien. - Asintió con la cabeza. - Así, por lo menos, tienes algo con lo que aguantar hasta la cena.

Se cruzó de brazos, para estar en equilibro sentado.


(No te preocupes, que yo tambien estuve ausente un tiempito ^^U)